jueves, 30 de mayo de 2013

Los juegos de la psicomotricidad para los niños. Juegos de movimiento para estimular a los bebés.



Psicomotricidad
La aplicación o intervención de la psicomotricidad en la educación de los niños se hace de forma muy divertida y entretenida. Es un estímulo o una reeducación para la vida cotidiana de los pequeños, dirigida a mejorar sus estimulaciones o en el caso de padecer alguna deficiencia reeducar al niño; se puede practicar al aire libre y en lugares cerrados.
Las clases de estimulación se dividen por edades como forma de situar al niño según sus posibilidades y capacidades. Mediante los juegos de movimiento los niños se desarrollarán físicamente y aprenderán conceptos como derecha, izquierda, delante, detrás, arriba,... que les ayudarán a situarse en el espacio y a ajustar sus movimientos. Los distintos y variados juegos de los cuales participarán los niños fomentará su coordinación, equilibrio, orientación y seguridad.
La psicomotricidad en la educación infantil
Juegos de psicomotricidad para niños.
En la intervención psicomotriz se considera primordial:
- El profundo respeto a la madurez y al desarrollo de cada niño.
- La intervención de fuera para dentro, es decir, desde el sensomotor hasta la interiorización.
- Potenciar la espontaneidad y la creatividad del niño a través de la percepción, la representación, el control y el equilibrio.
Didáctica y materiales para estimular la psicomotricidad.
Desde el principio de las clases se insiste mucho en la socialización del niño practicando juegos tanto en pequeños como en grandes grupos. Se usarán diversos materiales como medio de intercambio, comunicación y cooperación; se utilizan aros, pelotas, cuerdas, picas, telas, pañuelos, bancos, zancos, colchonetas, mantas, cajas de cartón, bloques de goma-espuma …. y serán dirigidos por estímulos exteriores como la música.
Generalmente las clases son divididas en tres etapas: el movimiento, la relajación y la expresión o representación.
1. En la primera etapa se emplean juegos relacionados con una música. Se juega con todo tipo de objetos empleando técnicas que haga moverse a los niños. Se investiga las innúmeras utilizaciones de cada objeto, se impulsa las relaciones y la cooperación entre el grupo. El movimiento nunca es buscado como fin sino como medio.
2. En la segunda etapa se introducen técnicas de relajación. El niño busca un lugar cómodo para tumbarse, tranquilizarse y sentir la música.
3. En tercera y última etapa está relacionada con la expresión. Se intenta que el niño hable, opine y se exprese a través de diferentes lenguajes (verbal, representativo, plástico, etc.), sensaciones, vivencias y conceptos que ha experimentado durante la clase. El principal papel del educador es el de proponer objetos, situaciones, sonidos, etc., temas generales de búsqueda dejando a los niños explorar ellos mismos todos esos elementos y saber esperar a que en sus búsquedas los niños los necesiten. Solamente en estas condiciones la expresión es auténtica, libre, espontánea y es donde las actitudes de huida, inhibición, aprobación u oposición, etc., aparecen o desaparecen.

lunes, 20 de mayo de 2013

Calmatopic stick: para los pequeños golpes.



Las caídas y los golpes se encuentran entre las causas más frecuentes de traumatismos infantiles. Es muy importante que los padres extremen la precaución para evitar que los bebés sufran algún daño. Tanto el hogar como la calle son entornos peligrosos para un bebé, por lo tanto es fundamental la vigilancia de un adulto.

Calmatopic stick “Evitar las caídas y los golpes en el hogar”

Un error muy común entre los padres es dejar al bebé sin protección sobre la cama pensando que no podrá caerse. Sin embargo, es frecuente que los bebés se retuerzan o muevan incluso cuando no gatean y puedan caerse desde la cama.
Para casos como este, conviene siempre tener en el botiquín del bebé Calmatopic stick, un gel en barrita para aplicar sobre el lugar donde el niño ha recibido el golpe que calma y reconforta al bebé en el momento.
La protección y la seguridad de los niños debe ser una rutina. No se trata de sobreproteger al bebé, sino de evitar golpes y caídas innecesarias. Crear un entorno sin peligro en casa es fundamental cuando los niños son pequeños. Una de las actividades favoritas de los bebés es explorar; su curiosidad no tiene límites y por ello conviene seguir estos consejos:
- Poner barras de protección en ventanas y escaleras.
- Utilizar topes en puertas y armarios.
- Utilizar cantoneras en muebles bajos y mesas.
- Tapar los enchufes.
- No poner a su alcance elementos cortantes o demasiado pequeños que puedan tragarse.

Golpes y caídas fuera de casa Calmatopic stick.
La calle o el parque son lugares muy atractivos; hay un mundo entero para descubrir, investigar y explorar.
Mientras el bebé no anda, la silla es un soporte perfecto que le mantiene cómodo y tranquilo. Sin embargo, cuando comienza a dar sus primeros pasos, el exterior se convierte en un lugar donde fácilmente puede golpearse. Su inestabilidad es todavía grande y por mucho empeño que pongamos, antes o después acabará cayéndose.
Para estas ocasiones se hace imprescindible llevar en la bolsita del bebé, no sólo pañales, toallitas húmedas o incluso su biberón, sino también Calmatopic stick. Es muy práctico sobre todo en caso de contusiones, chichones y hematomas.

¿Cómo funciona Calmatopic stick?
Calmatopic stick es un gel reconfortante para los más pequeños en barrita que posee las propiedades beneficiosas de tres plantas medicinales: árnica, harpagofito y matricaria marítima que aportan frescor, suavidad y alivio cuando la piel de tu bebé lo necesita.
Una de las ventajas de Calmatopic stick es lo sencillo de utilizar que resulta ya que funciona frotando suavemente la barra del stick sobre la zona de la piel que se desee aliviar y se puede utilizar tantas veces como sea necesario. No se puede aplicar sobre heridas abiertas.

A muchos niños les produce miedo el momento de curar un golpe y no dejan que sus padres les toquen la contusión. Temen que después del golpe y el dolor que ésto les ha producido la cura suponga otro mal momento.

Sin embargo, el stick de la rana les encantará y ellos mismos comprobarán que esta barrita aplicada sobre su piel no les produce ningún daño. Cuando lo conozcan, serán ellos mismos quienes pidan a los padres la barrita de la ranita para curar sus golpes.
Además, para familiarizar a los niños con el stick, los padres tienen a su disposición un juego gratuito para smartphone y tablet que encantará a sus hijos. ¡Es el juego de la rana! Sana, sana el stick de la rana.

Canción Cucucucu de Calmatopic stick


martes, 14 de mayo de 2013

La retirada del pañal.




Espera a que tu niño esté preparado
No hay una edad mágica en la que los niños están automáticamente preparados para dejar de usar pañales, pero la mayoría de ellos habrán desarrollado las destrezas físicas y cognitivas necesarias entre los 18 y los 24 meses (aunque hay niños que no están preparados hasta que tienen casi 3 años de edad, o incluso 4). Utiliza nuestra lista de comprobación para mantenerte al corriente del progreso de tu hijo y saber si ha llegado la hora de empezar a enseñarle a ir al baño solito.

Una vez que hayas empezado, si no obtienes buenos resultados al cabo de tres meses, eso significa que tu hijo en realidad no estaba preparado. Espera algunas semanas y vuelve a intentarlo.
Planéalo con antelación
Antes siquiera de salir a comprar el orinal infantil, es bueno que pienses y planees cómo quieres llevar a cabo el aprendizaje. Decide cuándo y cómo querrás empezar, si piensas ofrecerle premios o incentivos, qué harás cuando tu niño tenga accidentes, y cómo sabrás si es mejor abandonar por el momento y volver a probar más adelante.

Pero aunque es bueno planear, también es importante recordar que tendrás que ser flexible. No hay forma de saber de antemano cómo le irá a tu niño, ni qué técnicas le funcionarán mejor. Ten en cuenta que, al igual que con la mayoría de las
etapas importantes en el desarrollo de los niños, el éxito no suele ocurrir de forma linear, es decir, en avance constante hacia la meta. Tu niño podría empezar muy bien, y luego volver atrás en una etapa u otra del aprendizaje.

Habla acerca de tu plan con el
pediatra de tu hijo, las personas que lo cuidan y otros padres como tú. Cuando tengas un plan definitivo, asegúrate de que tanto tú como las demás personas que cuiden a tu niño puedan seguirlo (excepto si hay retrasos inesperados y otros obstáculos, claro).
Ten paciencia y mantén la calma
Aunque a los padres nos encantaría que nuestros niños aprendieran a ir al baño solitos lo más rápido posible, hay una serie de pasos para la retirada del pañal que tu hijo tendrá que superar, y esto es algo que puede llevar bastante tiempo. Es cierto que algunos niños aprenden en pocos días, pero para otros el aprendizaje dura varias semanas, o hasta meses, sobre todo hasta que puedan dormir toda la noche sin pañales.

No trates de presionar a tu niño para que abandone los pañales más rápido de lo que puede. Permítele que lo haga a su propio ritmo y que se acostumbre poco a poco a este nuevo y complicado proceso, y verás que avanza de una etapa a la siguiente naturalmente. Claro que puedes motivarlo cariñosamente, recordándole que use el orinal, leyéndole cuentos y halagándolo o recompensándolo cuando lo haga bien. Pero si tu hijo se retrae o retrocede, no insistas demasiado.
Elógialo cuando lo haga bien
A lo largo de todo su aprendizaje, tu hijo buscará en ti señales de aprobación y reconocimiento, los llamados "refuerzos positivos", por sus logros. No le desilusiones. Cada vez que tu niño trate de usar el orinal, o dé el siguiente paso en su aprendizaje (aunque no lo logre por completo), dile que lo está haciendo bien y que te enorgulleces de él. Pero no exageres; si lo elogias desmesuradamente lo puedes poner nervioso y aumentar su miedo de fallar, lo cual puede provocar más "accidentes" y retrasos.
Acepta el hecho de que habrá "accidentes"
Es prácticamente imposible que un niño deje de usar pañales durante el día y la noche sin antes tener varios "accidentes". Procura no enfadarte ni reprimirle cuando tu niño se haga pipí o popó encima; recuerda que hasta hace muy poquito tiempo tu hijito aún no había desarrollado completamente sus músculos, y por lo tanto no tenía el control necesario para lograr contener sus necesidades. Con el tiempo, tu pequeño se volverá muy eficiente, pero mientras esté aprendiendo, lo mejor que puedes hacer es limpiarlo calmadamente cuando se equivoque y sugerirle que la próxima vez intente utilizar su orinal.

“Sequillos”



INGREDIENTES

Para la masa

250 ml de agua
100 gr de manteca de cerdo
200 gr de harina
4 huevos
1 pizca de sal

Para la glas

½ vaso largo de azúcar glas
Un chorrito de zumo de limón
2 ó 3 cucharaditas de agua



PREPARACIÓN

Ponemos al fuego el agua con la manteca de cerdo y la sal. Cuando empiece a hervir añadimos la harina de golpe. Removemos inmediatamente y apartamos del fuego. Seguimos removiendo hasta que la masa forme una bola. A continuación añadimos los huevos uno a uno hasta que queden bien integrados.

Seguidamente ponemos la masa en una manga pastelera con boquilla ancha y formamos las rosquillas del tamaño que deseemos.

El sistema tradicional de toda la vida era poner cucharadas de masa en la bandeja del horno, previamente untada con aceite y espolvoreada con harina, (ahora ponemos papel vegetal) y se hacia el agujero con el dedo untado con aceite.


Precalentamos el horno a 200 º C y horneamos unos 10 minutos. Una vez hayan subido los sequillos bajamos el horno a 180º C y dejamos 10 minutos más. Pasado este tiempo, los sacamos del horno y los dejamos enfriar. Yo los he horneado durante 35 minutos

Para la glas mezclamos los ingredientes poco a poco, hasta que nos quede como un chocolate espeso. Lo cargamos en una manga pastelera con boquilla fina y decoramos los sequillos
Grado de dificultad: Muy fácil
Tiempo de elaboración: 1h 25 min